La encuesta realizada por BlueCoat traduce una hetereogeneidad inexplicable en el uso del video online por parte de los trabajadores europeos. Los españoles son quienes más lo usan, lo hace un 75% de los encuestados, pero solo el 19% lo hace para trabajar y el resto para fines personales. Quienes pierden menos tiempo con el video online en el trabajo son los alemanes (casi el 6%), son, también, quienes ven menos video online (solo el 12%).
Quienes más utilizan el video online para trabajar son los franceses (26,52%), seguidos de los británicos (23,78%), los españoles (18,75%), los holandeses (16,72%), los italianos (13,33%) y los alemanes (5,88).
La encuesta, realizada entre más de 2.000 trabajadores de los seis países, indica que los españoles son quienes más ven video online en el trabajo. Lo hace un 75% de ellos, seguido de los franceses (58%), los británicos (58%), los holandeses (44%), los italianos (43%) y los alemanes (12%). De este universo, quien ve más video online para trabajar son los alemanes (49%), seguido de los británicos (41%), los franceses 39%), los holandeses (38%), los italianos (31%) y los españoles (25%). Curiosamente, este mismo orden corresponde a la fama de seriedad profesional de estos países.
Sin embargo, ni fama ni porcentajes del estudio tienen que ver con la productividad por hora trabajada de estos países reflejada por Euroestat en su índice EU 27. Los datos de la oficina estadística de la Unión Europea indican que los trabajadores más productivos de los países entre los que se ha realizado la encuesta son los holandeses (135,8 %), seguidos de los franceses (133,5 %), los alemanes (123,9%), los españoles (107,8 %), los británicos (105,3 %) y los italianos (102,1 %).
El cruce de otros datos como herramientas puestas a disposición de las empresas para ayudar a la productividad de los trabajadores, número de horas trabajadas por cada trabajador o remuneración por hora trabajada nos darían datos aún más inesperados. La diferencia salarial entre estos países no es tan grande cuando se compara con el nivel de vida de cada uno, aunque si aumentan, en perjuicio de italianos y españoles, si se suman las ayudas sociales públicas y empresariales. Los españoles también salimos perjudicados en número de horas trabajadas porque alargamos nuestro horario laboral, y en herramientas de productividad porque tenemos menos. Eso podría explicar el porque vemos más videos online para divertirnos que para trabajar, a pesar de lo cual no somos más improductivos.