"La publicidad de Twitter está yendo muy bien", afirma Costolo en una entrevista para The Wall Street Journal. "Los niveles de participación están llegando al 3%, una cifra muy buena, en comparación con otras plataformas de interacción social", explica el director ejecutivo.
Esto se debe a que "los enlaces patrocinados son orgánicos, están incluidos en el timeline del usuario", una fórmula que ha permitido integrar los anuncios en la 'línea de tiempo' sin provocar demasiadas críticas entre los 'tuiteros', pero que dificulta al internauta ignorarlos, y que, por tanto, ofrece un mayor rendimiento a las empresas de publicidad.
La plataforma de microblogging está buscando desde hace meses un modelo de negocio que le permita introducirse en el mercado de la publicidad y el marketing como ya han hecho otras redes de interacción social, sin traicionar su simplicidad en la interfaz u obstaculizar la difusión de ideas en sus 'tuits'. El director ejecutivo ha subrayado la necesidad de forjar más estrategias de promoción y marketing, cuidando su línea corporativa y diseño minimalista.
Además, Costolo añade que "la naturaleza simplificada de los anuncios significa que pueden ser entregados en cualquier tipo de dispositivo, incluyendo los dispositivos móviles", una carrera difícil para otros grandes ya sentados en Internet como Facebook, según señala The Wall Street Journal.
Este enorme campo precisa muchas herramientas y aplicaciones para visualizar los resultados de los impactos, un hecho que la red de microblogging deja en manos de terceros, pues según afirma Costolo "Twitter no tiene ninguna intención de desarrollar estas herramientas de comunicación corporativa por su propia cuenta, eso es mejor dejarlo a los desarrolladores de terceros y a las empresas rivales".
Un ejemplo de estas tareas complejas puede ser el "análisis de las opiniones, lo que ayuda a las empresas realizar un seguimiento de lo que dice la gente acerca de ellos en Twitter, analizar los patrones", explica Costolo.
Asimismo, señala que la intromisión de Twitter en este campo resultaría perjudicial para su imagen. "Somos el ala de la libertad de expresión de la parte de la libertad de expresión", dijo, subrayando que la empresa no va a ofrecer datos de sus usuarios, pues es una "condición básica para trabajar en un entorno corporativo", afirma.
En este sentido, parece que la dirección de la empresa gira más en torno a cuestiones corporativas de marketing que al desarrollo de aplicaciones propias, una acción que insta a realizar a otros desarrolladores y añade en "gran interés" que tiene en ver nuevas herramientas.
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