Medios de Comunicación

Francia crea un contrato sobre la edición digital de libros 

E. Díaz | Martes 02 de septiembre de 2014

Después de varios años de negociaciones, los editores y autores franceses han fijado las condiciones del nuevo contrato de edición de los libros digitales, según recoge Le Monde. 



El Sindicato Nacional de la edición (SNE) y el Consejo Permanente de Escritores (CPE) habían iniciado las conversaciones hace dos años. Sin embargo, el año pasado las negociaciones se rompieron sin acuerdo porque los escritores querían tener la posibilidad de recuperar los derechos de sus libros digitales en el caso de que los editores no las explotasen, igual que ocurre con los libros impresos, pero los editores se oponían. Otro punto de fricción era la base de la remuneración de los autores porque los modelos existentes sólo recogían la modalidad de libro impreso.

Para desbloquear la situación la ministra de Cultura y Comunicación, Aurélie Filippetti, encargó a Pierre Sirinelli, la mediación en este conflicto. Finalmente, los autores han cedido en su derecho de recuperación de sus obras pero han conseguido garantías para que los editores les informen regularmente sobre sus cuentas y el nivel de ventas de sus libros digitales, porque si no lo hacen podrían perder los derechos de explotación de los libros.

Además, se incluye una cláusula de mínimos para todos los autores. Un escritor es libre para negociar los derechos más favorables directamente con su editor o a través de su agente. Esto también se aplicará a los contratos de edición digital.

Por otro lado, los editores que siempre habían tenido una posición ventajosa sobre los autores por asumir más riesgos, han conseguido que los contratos de propiedad intelectual no tengan una duración limitada en el tiempo, como demandaban los autores, que también se aplicará en los libros digitales.

El acuerdo que será firmado el próximo 21 de marzo en la apertura del Salón del libro de París establece los principios de funcionamiento del libro digital pero también incluye disposiciones específicas para el libro impreso. Aurélie Filippetti quiere ampliar este acuerdo con un proyecto de ley que modifique el Código de la Propiedad Intelectual para adaptar la industria cultural a los medios digitales.