Medios de Comunicación

(7) “Pagaremos por los servicios alrededor del libro, más que por los contenidos”

Primer Congreso Nacional del Libro Electrónico en Barbastro (Huesca)

Miriam Garcimartin | Martes 02 de septiembre de 2014

Javier Celaya dio las claves para entender por dónde se moverá el mercado editorial en el futuro en la interesante charla “Visión 20/20: tendencias digitales en el mundo del libro”. Metadatos, comunidades, autoedición, exportación, innovación o dinamización de precios son algunas de ellas. 



“Dosdoce.com” es un observatorio que analiza desde 2004 el impacto de Internet en el sector cultural. Su fundador, Javier Celaya, fue invitado al I Congreso Nacional del Libro de Barbastro para dar una óptima visión, 20/20, sobre las tendencias digitales de los próximos años.

1. Relación directa con los lectores. Si una empresa quiere tener una visión certera del mercado, debe de fomentar la relación con sus lectores. En un mundo con menos librerías, las editoriales no pueden operar a ciegas y Amazon no va a ser quien les ofrezca datos del mercado real.

2. Los datos son el petróleo del s.XXI. Crear comunidades de lectores no está enfocado a la venta, es una fase en la que toca invertir y perder. El comportamiento del lector es lo que interesa, base de la estrategia digital. El metadato, lo que pasa con un producto en el mercado, es el ADN que nos dará una ventaja competitiva. Si no se invierte en la obtención de datos en la era digital, las empresas sufrirán de discapacidad visual.

3. Auge de la autoedición. Las plataformas de autoedición son como un caladero que sirve para detectar nuevos autores, lo que se traduce en un nuevo canal de ventas. Hay mucho que aprender de la autoedición, que ofrece contraprestaciones en tiempo real sobre qué está pasando con un libro ahí fuera. Aporta una información clave para los autores, que no quieren saber cuántos libros venden anualmente, sino qué pasó con su obra la semana pasada. Esto permite reaccionar rápido para aumentar su visibilidad, hacer más promoción, etc.

4. Apuesta por la exportación / importación digital. Internet no tiene fronteras. Se publica para cualquier lector en todo el mundo. Por ello, se hace necesario el establecimiento de precios internacionales y fijar la atención en los mercados que puedan ser buenos para el negocio. España está en crisis, no hay que tener miedo a exportar libros ahora que en digital se puede hacer de forma eficaz y sostenible. Contar con traductores en las editoriales para convertir los textos a otros idiomas será absolutamente indispensable.

5. Nuevas formas de consumo y de pago. El sistema de precios “9’99 euros” ya no es válido. Si queremos un mercado de contenidos digitales legales, es necesario ofrecer modelos de suscripción para crear hábitos, que la gente se enganche y consuma. A partir de ahora, pagaremos sólo por lo que leemos. Al igual que pagamos por el suministro del gas, la electricidad, etc, abonaremos una cantidad mensual por tener un servicio de libros digitales. Gracias a él, tendremos sistemas de recomendación personalizados en el historial de lectura o descuentos en contenidos relacionados con nuestros intereses.

6. Precios dinámicos (oferta / demanda). La clave no son los precios bajos. El precio afecta a la demanda y hay que moverlo según convenga. Se puede jugar con los precios durante cierto tiempo para provocar una demanda, como lo que han hecho con el cine en Madrid estos días.

7. La tecnología se ha convertido en nuestra segunda piel. Hoy en día nos encontramos con dispositivos “ponibles”, que nos acompañan durante todo el día (smartphones). En un futuro inmediato, ropa u otros accesorios detectarán nuestro estado de ánimo o la reacción ante la lectura de un libro. Y en base a los resultados, una aplicación recomendará lo que más se aproxime a nuestros gustos. De la tecnología “ponible” a la “comible”: la ingesta de un chip servirá para registrar un día entero nuestro cuerpo, ver cómo reacciona ante cualquier situación y realizar un informe posterior con recomendaciones para mejorar cuerpo y mente.

8. Los sistemas de recomendación editoriales son del s.XX, no del XXI. La tecnología que se utiliza en el mundo del libro, basada en el historial de compra, se ha quedado atrás. Los editores deben invertir en esta nueva gama de tecnologías que se basan en la satisfacción real. Esto sí nos dará un servicio. Descubriremos libros que se acercan más a nuestra afinidad.

9. “Digitalización” de la experiencia en librerías físicas, que tienen que seguir siendo importantes. Hay tiendas que a través de pantallas me dicen qué puedo descubrir en la librería. También será importante tocar el producto digital y poderlo adquirir en la misma tienda, no ir a comprarlo a Amazon. Apps y códigos QR también personalizan la experiencia de compra.