Economía y Sociedad

Cómo dar otra cara a tu hogar

Foto: Antonio Martins Interior Design Inc /Homify
Viernes 18 de marzo de 2016
Vivir en casa es también aprovechar al máximo todos sus servicios y sus funciones. Cada espacio y cada apartado de la casa es algo que permite al anfitrión sentirse cómodo en todo momento y a la vez ofrecer confort a sus invitados.

Del salón a la cocina es importante cuidar completamente de la imagen de cualquier espacio de la casa, un lugar cada vez más polivalente en el que hoy en día se puede incluso trabajar. Sin embargo, no cabe duda de que uno de los principales espacios de la vivienda, además del más básico, es el dormitorio, una habitación en la que no solamente se duerme o se descansa sino que refleja también la identidad de quien la vive. Es entonces importante evaluar el valor de unas reformas al dormitorio.

Hacer obras en casa, sobre todo en cuanto a los dormitorios, es algo que requiere una inversión importante, puesto que en primer lugar hay que elegir el material y los complementos que se tendrán que utilizar para realizar este cambio. Dar otra imagen al dormitorio necesita entonces de ideas y conceptos de diseño e interiorismo que se apliquen bien tanto a las exigencias del anfitrión como al espacio disponible. A nivel económico, es entonces clave calcular los gastos previos en cuanto a materiales y obras por realizar.

Hay que elegir si empezar de cero, por ejemplo con las paredes, o si dar solamente algún toque decorativo. En el caso de que se quiera hacer una reforma total del espacio, el presupuesto será obviamente más elevado: el suelo, las paredes y los muebles principales suelen ser el gasto más relevante. Otro gasto a tomar en cuenta es el de las ventanas, cuyo material es importante para poder aislar mejor el dormitorio en cuanto a temperatura, que también otorgan más o menos iluminación a la habitación. La posición de la cama es el centro de gravedad del cuarto y a través de su colocación se pueden poner los otros muebles.

Según el estilo del dormitorio, del más clásico al más moderno, pueden cambiar los accesorios y los complementos decorativos, pero lo importante es que todo sea funcional y permita al anfitrión de disfrutar al máximo de este espacio vital primordial.