|
|
Blogs > Blog de María Cobos
|
Toda agencia ha dicho en algún momento a su cliente (o se lo ha dicho él a la agencia), “queremos una relación de total confianza, como si fuésemos una extensión del departamento interno de comunicación”. Y no debería ser una frase vacía, sino el objetivo final en toda relación cliente-agencia.
El drama de los refugiados de Siria ha alcanzado tales cotas que es imposible quedarse impasible ante los cientos de noticias y de imágenes que nos llegan cada día. Últimamente una parte del debate se centra en la responsabilidad que tenemos para paliar esta situación: gobiernos a todos los niveles, organizaciones sin ánimo de lucro, ciudadanos… ¿Y las empresas? ¿Tienen un porcentaje de responsabilidad como parte de la sociedad que son?
Los neologismos o la creación de nuevos términos son una constante en el sector de la comunicación y muchas veces vienen a poner nombre a prácticas que ya existían desde hace tiempo y que, bajo esa nueva denominación, cobran entidad propia y resurgen como tendencia. Lo hemos visto con el branded content o el storytelling y también sería el caso que nos ocupa hoy, el de la gamificación.
Al igual que ocurre con las recomendaciones de los usuarios a la hora de contratar un hotel o un servicio, en relaciones públicas, lo que otros dicen de ti tiene el mismo valor o incluso más que lo que una compañía pueda decir de sí misma o de sus marcas.
Al igual que ocurre con las recomendaciones de los usuarios a la hora de contratar un hotel o un servicio, en relaciones públicas, lo que otros dicen de ti tiene el mismo valor o incluso más que lo que una compañía pueda decir de sí misma o de sus marcas.
Mi primera experiencia con el retargeting fue el día que se me rompió la aspiradora. En realidad ese día simplemente busqué en Internet aspiradoras como la que yo quería, leí un par de críticas y… ¡listo! La aspiradora elegida me llegó a casa dos días más tarde. Durante los días siguientes comenzó a mosquearme la asombrosa casualidad de que todos los banners de publicidad de todas las páginas que visitaba me sugirieran aspiradoras y también… cepillos de dientes eléctricos ¡Anda! ¡Si yo quería uno!
Hace no mucho que oí hablar de un master o módulo de formación sobre coolhunting y de la historia de esta profesión y sus orígenes hace más de veinte años.
Y sin embargo es poco frecuente, no precisamente porque seamos infalibles, sino más bien porque nos da mucho reparo admitir un error o por miedo a que el fallo en sí adquiera protagonismo. A menudo a las empresas y a las organizaciones les de reparo hacer una rectificación pública y, sin embargo, a menudo también es muy necesaria.
|
|
|
|