3.500 graduados nuevos cada año están mayoritariamente abocados al paro o a cambiar de profesión
Si quieres trabajar de periodista, es conveniente que vayas al trabajo ya llorado. No te quejes en la redacción o ante el ordenador en tu casa (ya que los autónomos son una realidad creciente). Sabemos lo que nos pasa y tenemos sin duda una gran responsabilidad en ello, pero no terminamos de reaccionar con lógica ante la dura situación, tal vez porque seguimos colgados del 'aura' de la que alguien famoso llamó "la mejor profesión del mundo". Hay que bajar a la tierra.