Las cinco mayores universidades de Iberoamérica firmaron un acuerdo de constitución de la Unión, que tiene como objetivos favorecer el intercambio de alumnos y profesores, conseguir fondos de investigación y ofrecer titulaciones comunes en ambos continentes.
Para llevar a cabo sus actividades, contarán con el apoyo económico del Banco Santander. Su director general, José Antonio Villasante, calificó esta firma como "un hito histórico" que suma casi un millón de alumnos y 85.000 profesores de centros líderes en sus países. "No hay nada parecido en el mundo", señaló Villasante.
Las universidades comparten su compromiso con la educación pública, su bagaje histórico y la importancia que tiene para ellas la investigación, que representa "al menos el 40% de la investigación que se hace en Iberoamérica", según el rector de la UNAM de México, Enrique Graue.
A finales de noviembre la Unión celebrará su primera actividad con la organización de unas jornadas sobre la problemáticas de las grandes ciudades, con temas como las vacunas, las enfermedades tropicales y la violencia de género.
Tras la firma de la adenda, los rectores se trasladaron al Palacio de la Zarzuela para presentar el proyecto a Felipe VI.
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