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Entrevista exclusiva | María Sainz, analista del VocentoLab

María Sainz en las instalaciones del VocentoLab, en Madrid.
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María Sainz en las instalaciones del VocentoLab, en Madrid.

“No creo que haya que reinventar completamente el periodismo, pero sí adaptarlo y transformarlo”

Por Miguel Ángel Ossorio Vega
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maossoriovegagmailcom/13/13/19
http://www.maossoriovega.com
martes 10 de enero de 2017, 12:28h
El VocentoLab es el campo de experimentación en nuevas tecnologías de un grupo cuyo principal negocio es vender periódicos en papel. Toca reinventarse… y nada mejor que hacerlo con una mentalidad propia de Silicon Valley.

Hemos hablado con María Sainz, una joven periodista que forma parte de este sueño digital que ha emprendido Vocento. En este laboratorio, que une bajo su techo a periodistas y a expertos en nuevas tecnologías, sólo hay una premisa: experimentar. Ese es el único camino para reinventarse cuando tu centenario negocio (según te dicen por todas partes) está en peligro. Pero ellos no tienen miedo: sólo ganas de innovar y mucha ilusión ante un futuro que no es tan oscuro como pintan. Si sabes cómo diseñarlo a tu favor.

¿Qué es el VocentoLab?

María Sainz: Es el laboratorio de innovación, experimentación y formación del grupo Vocento, una unidad pequeña encargada de promover la transformación digital y de ayudar a nuestras cabeceras y al resto de equipos de Vocento en la carrera de la innovación.

¿A qué se dedica?

M.S.: Valoramos y analizamos las nuevas tendencias del periodismo y del negocio digital a nivel nacional e internacional, identificamos las que pueden ser más relevantes para nuestro caso, y experimentamos con proyectos piloto o de I+D con las que consideramos pueden aportar un valor añadido al grupo, a nuestras marcas periodísticas y a nuestros lectores.

¿Qué perfiles profesionales están en el VocentoLab? ¿Sólo periodistas?

M.S.: Somos un equipo multidisciplinar, pequeño y muy joven. El Lab cuenta con un product manager, que es un ingeniero informático muy enfocado al desarrollo de producto mobile, y un analista digital también con un perfil especializado en mobile y periodista de formación. Además, el Vocento Media Lab tiene su propia startup periodística a modo de campo de pruebas, Eslang.es, un nuevo medio para millennials compuesto por una pequeña redacción de tres periodistas y un responsable técnico especializado en desarrollo Wordpress.

¿Qué áreas investiga: formatos, lenguajes, software, negocio…?

M.S.: Abarcamos, o al menos eso intentamos, todas las áreas relevantes para el futuro del negocio periodístico en la era digital, mobile y social. Eso significa que nuestro reto es no caer en la fascinación de lo nuevo por lo nuevo, sino ser selectivos en las líneas de trabajo. Lo que es importante para Buzzfeed no es necesariamente relevante para el Sur de Málaga. En ese sentido, impulsamos la innovación incremental en tres áreas básicas: las redes sociales, las nuevas narrativas interactivas y audiovisuales, y los nuevos estándares técnicos y periodísticos en dispositivos móviles (Google AMP, Facebook Instant Articles…). Además, intentamos hacer una innovación más avanzada, con proyectos de I+D actualmente en periodismo-robot y el empleo de chatbots. Un ejemplo serían los desarrollos experimentales de información de servicio automatizada que hemos lanzando en los medios de Vocento, InfoPlayas e InfoEsquí. Finalmente, también tenemos un ojo puesto en nuevas tendencias en el mercado publicitario, en los nuevos negocios digitales y en la innovación tecnológica, y colaboramos con los equipos de Comercial, Tecnología y Negocio Digital de Vocento con estudios, benchmarks y pilotos.

¿Cómo funciona el VocentoLab? ¿Cómo sería un día de trabajo allí?

M.S.: Es difícil prever al 100% en qué va a consistir un día en el Vocento Lab. Las herramientas básicas que utilizamos son, por un lado, las de “pensar” –informes y análisis, benchmark comparativos, cuadros de oportunidades…- y, por otro lado, las de “hacer”, como el desarrollo de pruebas de concepto o de proyectos piloto en clave lean start-up, con metodologías ágiles. Nuestra filosofía parte de que ayudamos más a un gran grupo como Vocento con mucho de lo segundo, y no mucho de lo primero. Cada día solemos estar ‘enfrascados’ en algún proyecto determinado, bien desde el Lab, con ABC o algunas de nuestras cabeceras regionales o revistas. Hay mucho de análisis de datos de audiencia o de aspectos más técnicos. Y las propias dinámicas ágiles del scrum acarrean su propia burocracia. En cualquier caso, el ritmo endiablado tanto de la innovación tecnológica como de la propia actualidad periodística suele variar nuestros calendarios y prioridades, con lo que puedes llegar con una idea de lo que vas a hacer ese día y acabar trabajando en otra cosa muy distinta.

¿Existen otros laboratorios similares en otros medios de comunicación? ¿Cuál es vuestro modelo?

M.S.: Sí, varios cuentan con estos laboratorios pero no hemos tomado como modelo uno de ellos en concreto. El término media lab tiene muchas acepciones y cada uno debe encontrar su propia fórmula. Por supuesto, hablamos mucho con nuestros colegas de los laboratorios de RTVE, El Confidencial o Diario de Navarra. Existe entre nosotros una colaboración informal muy saludable, y estuvimos con ellos antes de montar el Vocento Media Lab allá por diciembre de 2014 para conocer de cerca su experiencia. Nos sentimos orgullosos de poder enmarcarnos dentro de una tendencia creciente en España y muy necesaria en los medios de comunicación.

¿Qué habéis desarrollado hasta ahora? ¿Habéis aplicado algo a los medios del Grupo?

M.S.: Hemos desarrollado bastantes proyectos, siempre con el ojo puesto en obtener aprendizajes útiles para todo el grupo. Algunos son simples mejoras o actualizaciones de lo que ya había y otros son proyectos que se han desarrollado desde cero. Es el caso del portal para jóvenes Eslang.es, que nos está dando muchas alegrías al cubrir un nicho de audiencia muy interesante. Eslang nos ha servido como campo de pruebas en diversos ámbitos: desarrollos Wordpress, mejoras del player de vídeo que usamos en Vocento, desarrollos en AMP (Accelerated Mobile Pages de Google), o la experimentación con formatos publicitarios nuevos. Desde el punto de vista de la I+D, hemos usado Eslang para hacer los primeros experimentos con bots conversacionales (chatbots), una de las tendencias de 2016, en Facebook Messenger y en Telegram. Como desde el área de Innovación se impulsa también la agenda de las redes sociales, en Eslang probamos las funcionalidades más novedosas, como los Facebook Instant Articles o Facebook Live, Instagram Stories, Snapchat… Además, es un portal full responsive con scroll infinito, con lo cual podemos probar aquí funcionalidades de navegación y analizar el impacto de ciertas decisiones que luego llevamos, o no, a nuestras cabeceras.

¿Qué se necesita para crear un laboratorio de estas características?

M.S.: Lo primero de todo es reconocer que el grupo lo necesita y puede beneficiarse de su existencia. En este punto es clave que la dirección lo apoye. Una vez conseguida esta ‘concienciación’ –yo me la encontré ya dada- la mitad del camino está recorrido. Nosotros somos muy afortunados ya que Vocento apuesta por la innovación y nos apoya y escucha, algo que en la empresa periodística no suele ser sencillo de lograr. El siguiente paso es lograr que ese apoyo se traduzca en un mínimo presupuesto y, dependiendo de éste, montar un equipo de profesionales apasionados por la innovación y la comunicación. En el Lab somos bastante ‘freaks’ y muy curiosos; pequeñitos pero matones. Con todo esto en pie, creo que es clave establecer una cultura de transparencia y rendición de cuentas de cara a la organización. Nosotros lo hacemos por cauces formales, pero también informales con una newsletter interna sobre innovación y las #LabSessions, encuentros informales y abiertos de compartición del conocimiento que montamos de vez en cuando.

¿Hacia dónde va el periodismo? ¿Y el periodismo digital?

M.S.: El rumbo del periodismo, digital o no, debe ser siempre el de atender cada día la misión cívica que nos encomiendan las sociedades a las que servimos, la de informar con rigor. No creo que haya que reinventar completamente el periodismo -hay lecciones del pasado que son esenciales- sino adaptarlo y transformarlo en función de las nuevas tecnologías, que revolucionan el negocio vertiginosamente, y de las nuevas necesidades y formas de consumo que éstas van creando en la audiencia. Como el presente va muy rápido y es difícil predecir el futuro, nuestras máximas sobre el periodismo digital para este 2017 serían: experiencia de usuario y velocidad de carga lo primero; el aprovechamiento estratégico inteligente de las redes sociales y las plataformas de distribución de la información; y el orientar los dos elementos anteriores a afianzar la fiabilidad de los contenidos y la confianza con nuestros lectores.

¿Tienen futuro los medios impresos, las cadenas de televisión, la radio…?

M.S.: La respuesta corta es sí. Se verán transformados, claro, por la digitalización acelerada en la que vivimos, al igual que cualquier otra industria: la banca, la hostelería, la automoción… Eso acarrea el reto tremendo de gestionar esa transición, de aprender a vivir en un estado de transformación permanente, todo ello asegurando la viabilidad del negocio, que es lo que permite que los medios de comunicación sigan pagando la nómina a mucha gente y haciendo que nuestras sociedades sean más pluralistas e informadas. Pero la demanda por la información, el contexto y el entretenimiento (esperemos que inteligente) siguen ahí, y es cuestión saber aprovechar las oportunidades que traen las nuevas tecnologías.

¿Cómo crees que se puede rentabilizar un medio en la era digital?

M.S.: La revolución digital pone en cuestión los modelos de negocio tradicionales en la industria por un lado, y abre nuevas vías de financiación del negocio periodístico por otro. Es verdad que en este momento de transición existe mucha incertidumbre sobre el modelo de los medios en la era digital y mobile, y que está teniendo un impacto y un coste muy fuerte en medidas de recorte. Pero las opciones están ahí: los modelos de suscripción digital han evolucionado mucho, con distintas opciones; las formas de propiedad en Estados Unidos han dado paso incluso a la filantropía en la industria; la publicidad en el medio digital es quizás la vía de monetización más dinámica y convulsa, con una posición muy fuerte de los gigantes tecnológicos, y mucha innovación en el branded content, la publicidad nativa y la programática; y, finalmente, muchos -es el caso de Vocento- apuestan por el desarrollo de nuevos negocios digitales. Vocento acaba de lanzar el Local Digital Kit, por ejemplo, como una solución de servicios digitales a pequeños negocios locales.

¿Cuál es el futuro de la prensa diaria regional?

M.S.: La prensa regional en España juega un papel vertebrador fundamental porque cuenta con el poder de la información local, la más cercana, la que más interesa a los lectores. Era así en la época del print y sigue siéndolo ahora, en la digital: es casi una anécdota, pero en el País Vasco ‘El Correo’ (editado por Vocento) lidera el ranking digital por delante de Google y de Facebook. Y lo que he comentado antes aplica igualmente a los medios locales. También deben adaptarse a las nuevas tecnologías y tendencias de consumo, con unos retos muy similares a los del resto de la industria. Pero tienen a su favor a un público especialmente fiel, con una vinculación muy fuerte con la marca informativa. Todas las métricas digitales que manejamos lo demuestran. Eso, en los tiempos que corren, es oro puro.
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