Vox Media, BuzzFeed, Mic o Mashable han conseguido abrirse hueco en Internet e incluso superar en muchos aspectos a marcas consolidadas durante décadas, pero sus previsiones no son halagüenas: despidos, cierres de ediciones o rentabilidad por debajo de lo esperado están a la orden del día entre quienes estaban llamados a diseñar el periodismo del futuro, aplicable a los demás. ¿Qué está pasando?
Los medios que saborearon las mieles del éxito auspiciados por la publicidad y el tráfico, se han visto abocados a remodelar sus negocios
Los años en los que los medios tradicionales se encontraban en plena transición digital, consideraban a los nativos digitales el espejo en el que debían mirarse para construir un nuevo modelo de negocio en Internet. Hoy en día, el poder de Facebook y Google, los menores ingresos por publicidad digital o un cambio de tendencia en el tráfico web en el que prima más la calidad que la cantidad, han mermado el poder de los medios nacidos en la Red.